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El campo de batalla de nuestro tiempo

El campo de batalla de nuestro tiempo

En audio puedes encontrar un episodio del Podcast Emergente sobre este tema.

Los subtítulos son

  • El campo de batalla ha cambiado
  • Un mundo acelerado
  • La antigua version del Software
  • Tu eres mas que la version actual de tu Software
  • La batalla es interna
  • El mundo ahí afuera es un reflejo de esta batalla interna

Durante muchos años, generación tras generación estuvo experimentando guerras y revoluciones. Pero esto ha ido cambiando, la guerra con el tiempo ha ido desapareciendo. Pasamos de cerca de un quince por ciento de muertes por violencia humana en la época ‘pre-agricultura’, a un cinco por ciento en el siglo XX. Hoy en día cerca de un uno por ciento de las muertes son causadas por violencia humana.

Platicando con amigos en Alemania, sus historias y las de sus familiares, me ha ayudado a sensibilizarme de este tema, a darme cuenta de que no es algo tan lejano como a veces parece. Creo que vamos día a día por la vida en automático tomando este hecho por sentado. Es una de las épocas mas seguras para vivir. La necesidad de vivir constantemente en supervivencia buscando a donde emigrar o como proteger a tu familia de alguna invasión o batalla casi ha desaparecido por completo. Principalmente desde el momento en que experimentamos nuestro casi suicidio con la bomba atomica.

Muchos de nosotros que nacimos en una época post guerra, a pesar de haber aprendido algunas de estas historias o movimientos armados en teoría, no terminamos de entender lo que esto significa. A pesar de que este tipo de guerras han casi desaparecido por completo, seguimos viviendo en supervivencia como si en cualquier momento la violencia humana será desatada. En gran parte creo por la influencia de los medios y nuestra adicción por vivir en este estado.

El campo de batalla ha cambiado

El campo de batalla a ido cambiando poco a poco a través de los años. Ha dejado con el tiempo de ser ahí afuera y con armas. Hoy mucha mas gente muere por depresión y suicidio que por guerras o terrorismo. Cada vez mas muertes son causadas también por nuestro estilo de vida, muchas de ellas empujadas por el estado de estres y ansiedad en el que vivimos. El campo de batalla cada vez es mas dentro de nosotros que ahí afuera.

Las batallas de nuestro tiempo entonces han dejado de ser en el campo y con armas. Hoy en día la batalla está dentro de ti, la batalla es interna. Una batalla entre el mundo que se nos ha entregado y el mundo que está emergiendo. Una batalla entre las formas habituales/aprendidas de hacer las cosas y una nueva realidad, una nueva forma de vivir. Una batalla entre tu máximo potencial que quiere emerger y los programas que crean quien eres tu hoy. Una batalla individual y colectiva.

Un mundo acelerado

Hace algunos años, el mundo caminaba a un ritmo muy distinto. Los cambios importantes sucedían cada varias décadas o incluso cientos de años. Tomaba bastante tiempo para que las formas de hacer las cosas cambiaran de manera significativa. Formas de ser, de pensar y de hacer las cosas eran transmitidas generación tras generación y las cosas continuaban casi igual indefinidamente.

Sin embargo, desde la aparición de la tecnología, las coas han cambiado. La tecnología lo ha cambiado todo. Nuestra manera y ritmo de vida es completamente distinto no solamente que hace 50 años, sino es distinto que el año anterior y que la semana pasada. Lo que aprendiste hace unos años ya no es vigente, la forma de hacer algo ya no es la mejor, incluso formas de ser y pensar que antes quizá fueron efectivas, hoy pueden ser muy ineficientes y estar causando otros problemas.

Este ritmo de cambio es algo que nunca habíamos experimentado, y que nuestro cuerpo y mente hasta ahora no estaban muy acostumbrados a experimentar. Una gran parte de nosotros quiere seguir haciendo lo que conocemos o seguir actuando como de costumbre, mientras el entorno nos empuja a ser alguien diferente. No estamos acostumbrados y nos cuesta trabajo actualizarnos, actualizar nuestro software para poder adaptarnos y vivir en el nuevo mundo, el mundo que emerge cada día.

La antigua versión de software

Desde que somos pequeños aprendemos y absorbemos casi todo de nuestro entorno. Programas, creencias, formas de ser y de pensar son implantadas en nosotros. Eso y nuestra genética van moldeando en gran parte lo que consideramos ser “yo”. Vamos por la vida actuando e interpretando todo en base a este programa, en base a lo que hemos creado de nosotros mismos. Pero tú eres mucho más que eso, si es que te das la oportunidad de observarlo, de dejarlo emerger.

La forma en que vives actualmente, como piensas y actúas, es un programa, es como un software que has descargado en ti desde pequeño y que desde entonces poco o nada ha cambiado. Quizá ha tenido algunos ajustes y se ha ido adaptando poco a poco en base a otras experiencias en el camino, pero gran parte sigue siendo lo mismo. Sin embargo, este software es solo uno de miles posibles.

En un mundo disruptivo, donde todo cambia ahí afuera constatemente, donde la realidad con la que interactuamos es distinta cada día, tener la última versión del software no solamente es una bonita decisión, es necesario para poder vivir en este nuevo mundo, es fundamental para crear tu mejor vida.

Tu eres mas que la version de tu software actual

Haber recibido un software específico, no significa que eso eres “tu”. Es decir, si he recibido un programa que dicta quien soy yo, como me llamo, como debo comportarme, cual es mi rol en la vida, además de miles de otras funciones de como pensar y actuar, eso no significa que es la única y final versión de mi software, no es la versión final de quien soy.

Hay una parte de nosotros que va más allá del software que tenemos actualmente, una serie de programas que pueden ajustarse para crear una nueva versión de nosotros mismos, una versión distinta a lo que hasta ahora has creído que eres. Esa versión de ti, ese software nuevo, está constantemente queriendo ser descargando y actualizando, te notifica en repetidas ocasiones, pero decidimos no hacerlo. Constantemente tomamos la decisión de mantener nuestro software anterior, en gran parte porque tenemos miedo de dejar de ser lo que creíamos que éramos, de convertirnos en alguien nuevo, diferente.

Hace todavía algunos años, dejar ir estos programas, dejar ir lo que aprendiste y convertirte en una nueva y actualizada versión de ti mismo era una bonita opción que solo algunas personas con coraje tomaban. Pocos se aventuraban a pasar por esta transformación, pero grandes eran las recompensas. Hoy la situación es distinta, tomar esta decisión no solamente es para vivir una vida plena y feliz, el mundo nuevo nos está empujando a este extremo, a renovarnos o morir.

La batalla es interna

En el mundo de hace un par de generaciones constatemente había batallas ahí afuera que influenciaban nuestra forma de vivir. Hoy el mundo es muy distinto, las guerras han casi desaparecido y la batalla se ha desplazado a otro lugar. La batalla ahora esta dentro de nosotros. Una batalla entre el yo y el YO, entre el viejo y el nuevo mundo, entre los habitos del pasado y lo que emerge momento a momento dentro de todos nosotros.

Si no estamos constatemente dejando ir lo que hemos aprendido, nos vamos a quedar atrás. Si no nos renovamos constatemente, y dejamos ir lo que hasta ahora hemos sido, para convertirnos en una nueva y mejor versión de nosotros, las cosas van a ser cada vez mas complicadas. Se manifiesta por ejemplo en situaciones donde cada vez es más difícil encontrar oportunidades, encontrar trabajo, encontrar pareja, etc. Se nos hace cada vez más difícil hacer frente al mundo y vivimos en estres y ansiedad que a su vez poco a poco se van materializando en enfermedades o depresión. Dos de las causas más grandes de muerte en el mundo.

Al igual que en una guerra, la batalla que tenemos enfrente, si no la ganamos, puede costarnos la vida. En un mundo como el de hoy, resistirnos a un cambio fundamental desde adentro, nos está llevando en una dirección que causa mas muertes hoy que cualquier otro tipo de violencia humana. Si existe una batalla hoy en día, es la batalla que tienes dentro de ti cada momento.

En vez de seguir volteando ahí afuera para encontrar los eventos o circunstancias que moldean nuestra vida y que confirman todo lo que creemos, hoy necesitamos voltear hacia adentro y ganar esta batalla desde ahí, de adentro hacia afuera. Ganar la batalla al darte cuenta y evitar juzgar, al darte cuenta y dejar de criticar, al darte cuenta y tener empatía, al tener gratitud por lo que tienes, etc. Poder ganar estas batallas internas cada uno de nosotros, todos los días, en cada momento, es donde hay que empezar. Ahí es donde todo se origina.

El mundo ahí afuera es un reflejo de esta batalla interna.

Las batallas internas que tienes cada día para ser mas quien tu realmente eres, para sanar ideas o traumas del pasado que vienen cargadas en ti en tu software, y convertirte en tu máximo potencial, son las principales batallas de nuestros días. Hay más que suficiente trabajo interno que las que crees que hay afuera, hay suficientes batallas dentro de nosotros que ganar todos los días. Enfoquémonos primero ahí, para crear el mundo que queremos crear.

Equiparte con las herramientas para poder hacer frente a esta nueva realidad, saber identificar estas dos fuerzas internas que te jalan en direcciones distinta, acostumbrarte a dejar ir y convertirte en algo nuevo constantemente, será indispensable para ganar la batalla. Para sobrevivir en el nuevo mundo y para poder construir la vida que en realidad quieres lograr.

Una gran batalla esta sucediendo hoy, estamos entre dos mundos que quieren manifestarse. Un mundo que se resiste y nuevo mundo que quiere emerger. Esto sucede tanto a nivel individual como colectivo. Si entendemos que lo individual, lo que esta dentro de todos nosotros es lo único que esta realmente en nuestro control y que esto es lo que crea el colectivo o realidad ahí afuera, podremos empezar a enfocar nuestra energía en responsabilizarnos, sanar, y contribuir en crear nuestra mejor versión, nuestra mejor posibilidad. Un mejor tu, un mejor yo, un mejor mundo.