La prisión ¿Yo también estoy en una?

El tema de “El ciclo” muchas veces lo llamo también la prisión. Uso este término para referirme a este ciclo de pensar y sentir cuando es inconsciente. El ciclo que se refuerza a si mismo y crea más de lo mismo. Sin embargo, preferí llamar a esto primero como “el ciclo” porque el termino prisión puede tener fácilmente una connotación negativa, y tú estado de ser no es necesariamente algo negativo. El estado de ser es simplemente es un ciclo que se refuerza a si mismo con tu pensar y sentir y que termina siendo como una espiral hacia arriba o hacia abajo que va creando tu realidad en base los programas que tienes en ti.

Sin embargo, este estado de ser, al seguir reforzándose a sí mismo, y como solo podemos percibir o sentir aquello que esta de alguna manera programado o conectado en nosotros, entonces se convierte en una prisión de cual es difícil salir. Es un ciclo interminable, una burbuja, una capsula. En otras palabras, una prisión. Una prisión dentro desde donde es difícil poder ver lo que hay afuera o más allá de esta.

Mas allá de la Prisión

Ahí afuera hay millones de bits de informacion. Pero solo podemos capturar unos cuantos bits con nuestros sentidos. Son solo unos cuantos bits que podemos capturar de todo lo que sucede ahí afuera porque es lo que estamos listos para percibir. Hemos creado programas y conexiones cerebrales que son capaces de capturar cierta información.

Enfrente de ti puede estar el amor de tu vida, la oportunidad que siempre buscaste, la riqueza que podría transformar el mundo o la persona que necesitas para aquello que sueñas en realizar, pero no las vas a percibir a menos de que estés listo, a menos que tengas ya algún tipo de conexión neuronal o capacidad de percibirla.

La única forma de percibir esta oportunidad, persona, etc., es viendo la realidad desde una posición más allá de tu estado de ser actual, de realidad actual, más allá de tu burbuja, más allá de tu prisión. Es decir, más allá de tus formas de pensar, sentir y actuar actuales. Outside of the box, outside of the prison.

Dejar la prisión, requiere un nuevo tu

La verdad es que tú eres tú único límite. Cuando digo tú me refiero a tus programas actuales que te limitan y crean tu personalidad actual. Una personalidad que aún no es capaz de lograr, observar o recibir aquello que anhelas, que aún no es capaz de crear tu mejor vida. Como lo mencionamos, hacerlo va a requerir pensar fuera de la caja, pensar fuera de la caja va a requerir un nuevo tú, y esto significa tener que dejar ir al viejo tu y eso puede ser muy incómodo.

Dejar ir la idea que tenías de ti, las formas habituales de ser y sentir, es en la mayoría de las ocasiones una de las partes más difíciles. Es más fácil se la victima de tus circunstancias, y que tu entorno provoque las mismas reacciones emociones y pensamientos en ti. Es mas fácil ser victima para con ello mantener tu personalidad conocida, que tomar responsabilidad, que crear tu propia vida y convertirte en creador. Pero para poder crear un cambio, sera necesario tomar responsabilidad de todo aquello que vas creando, de todo aquello que sucede en tu vida.

¿Yo también estoy en una prisión?

Todos estamos dentro de una caja. Nacemos en una caja que quiza elegiste o quizá no. Eso puede sonar no muy motivador, pero la realidad es que es tu decisión quedarte o no en esa caja, en esa prisión. Similar a como lo platicamos en el tema de las vidas pasadas, tu caja podrá haber sido entregada a ti por tus genes y programas, pero es tu responsabilidad sobreponerte a ellos, sanar esa parte de ti, para salir de esta prisión. Hacer esto no solo te libera a ti de una prisión, con ello se estan liberando muchos más que vinieron antes que tu y muchos otros que vendrían.

El problema es cuando uno ni siquiera sabe que está en una prisión. Bob Proctor siempre menciona. “No puedes escapar una prisión hasta que puedas reconocer que estas en una” – No puedes escapar una prisión si ni siquiera sabes o consideras que estas en una. No puedes salir de tus circunstancias actuales y crear una mejor vida si ni siquiera consideras que estas en un ciclo o prisión que tú mismo estas creando en base a programas, creencias e historias.

La frase de Bob continua… “la gente que decide vivir dentro de los límites de sus viejas creencias continúa teniendo las mismas experiencias. Toma esfuerzo y compromiso romper estos viejos patrones”. Toma esfuerzo poder ver estos patrones, toma esfuerzo observar estas creencias que viven a través de ti que hacen recrear lo mismo en tu vida. Toma coraje salir de estos ciclos, toma coraje salir de esta prisión. Toma esfuerzo y coraje convertirte en una nueva persona.

Saliendo de la prisión

Quizá a algunos de ustedes no les guste escuchar esto, pero considero que siempre estaremos en una caja, en una pequeña prisión. Por lo menos viviendo en este cuerpo. Siempre habrá una caja más grande, una prisión más grande. Una caja mas grande que nos dará una mayor y gran perspectiva, pero aun así una caja de la cual hay que aprender y entender que seguimos teniendo limitantes y programas que nos mantienen en una.

En el momento en que empezamos a darnos cuenta de esto y vemos que estamos en una caja, en una prisión, empezamos a salir de ella. Cuando podemos darnos cuenta de este ciclo y observar, entonces la puerta para salir de esa prisión se empieza a crear y empezamos poder sentir la posibilidad de una realidad fuera de esta caja, sentimos la libertad de una vida fuera de esta.

Si aprendemos a conectar más con nosotros mismos, con nuestra intuición, con nuestro corazón, con lo que emerge desde dentro de nosotros, con esa visión o posibilidad de nuestra mejor vida, las paredes de la prisión se empiezan a hacer evidentes, y es ahí donde empezamos a crear el camino hacia afuera de esta prisión, el camino hacia nuestra libertad, el camino hacia nuestra mejor versión, el camino hacia nuestra mejor vida.

Es momento de liberarnos de nuestras cadenas y emprender el viaje que, aunque no sea sencillo, nos va a llevar a experimentar una realidad más allá de lo que conocemos, mas allá de nuestras limitantes y emerger hacia la vida y realidad que nos espera.

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